Y yo soñándote en Berlín...♪

lunes, 4 de octubre de 2010

El japonés y los cuentos cantados

Estaba en un restaurante japonés de la costa. Un restaurante japonés es como un restaurante chino, pero más caro y con diferencias en la comida que sólo notan los expertos sibaritas en comida oriental. Yo no soy experta en comida oriental, pero me gustan los palillos y las bolitas de carne envueltas en hojaldre. Una parte de la mesa hablaba sobre antiguos compañeros de facultad, de instinto, de colegio. La otra mitad sobre monólogos.
Entre un tallarín y un trozo sospechoso de carne alguien preguntó: "¿Habéis visto ese monólogo de Dani Rovira? El del huevo, el pedazo y la pechá". Unos afirman, sólo uno niega y un par empieza a recitar de memoria partes del monólogo. Entonces yo comenté que Rovira había grabado un disco junto a un par de cantautores. El dúo Sortilegio. Y para mi sorpresa, Alejandra (Ale), dijo: "¿Con Dani Rovira? Qué bueno. Yo conozco a Diego, fuimos juntos al colegio. Su novia cantaba también, ¿no?". Asiento, un tanto perpleja. "¿Qué tal el disco?". Traté de ser breve: "No tiene desperdicio. Grabaron varios de sus temas como si fuera un cuento, narrado por Rovira. Aunque son los mismas canciones, no es como el primer trabajo que sacaron (o que yo tengo), es más guitarra, piano y voz, es más...". Hice un gesto con las manos, como si se abriera una ventana a causa del viento desde mi pecho: "Cuentan cómo se conocieron y la historia -el cuento- de los dos". Ale asiente: "Creo que nunca le escuché cantar, hemos coincidido en otras ocasiones, pero nunca les escuche cantar", dijo Ale. "Me gustaría escuchar el disco... El único que tengo de cantautores es de un chico que a veces tocaba con ellos...". "¿Artacho". "Sí, sí, ese. Cuando estaba en un grupo... `Los Incas´, creo que se llama". Mi cara de sorpresa tuvo que decir algo más, porque Ale se apresuró a decir: "La próxima vez que nos veamos te lo dejo, y si puedes me prestas el de Diego y Rovira". Trato hecho. Y pensé que eso sí que fue "un poderoso rovilegio".
Y que estas cosas sólo pasan en un restaurante japonés.

1 desterrados:

Diego y Laura dijo...

Hola Mar,

acabamos de leer esta anécdota en el Japonés y nos ha encantado. ;)

Si vuelves a ver a Ale dale un abrazo de nuestra parte.

Un abrazo fuerte y mucha música.

Diego y Laura